¿Cómo es el tiempo?

Naves espaciales.en el espacio.. Pixabay

¿Qué es el tiempo?

El tiempo es casi la perfecta sincronización dinámica de la existencia ya que la perfección absoluta no existe.

Pero el tiempo es mucho más, porque gracias al tiempo se pudo formar la existencia ordenada. Es el propio tiempo el que transforma a la existencia desordenada en existencia ordenada, que es la existencia que conocemos.  Por tanto, el tiempo es el que posibilita que puedan existir en la existencia las sincronizaciones adecuadas para que existan las dimensiones. 

El tiempo se puede sincronizar dinámicamente en infinidades de sincronizaciones dinámicas distintas con diferentes velocidades. Y en cada sincronización puede crear un tipo diferente de existencia sincronizada. Existencias que pueden coexistir con otras existencias y tiempos diferentes sin pertenecer a la misma existencia ni al mismo tiempo. De esa manera pueden adaptarse un tiempo a otro y existir infinidades de universos en un mismo universo, pero realmente solo puede existir un solo universo aunque puedan existir unidos infinidades de  espacios-tiempos que se pueden confundir con universos separados del universo. 

Cada sincronización del tiempo distinta es un espacio-tiempo distinto 

Cada sincronización distinta del tiempo es un espacio-tiempo distinto pero unido al espacio-tiempo universal, cada espacio-tiempo distinto parece ser un universo diferente con su propia existencia y tiempo diferente, pero no lo es. 

Como nada puede dejar de existir ya que todo se transforma, un ser vivo al morir podría reencarnarse en otra vida de otro espacio-tiempo a través del alma y del tiempo.

Las almas son las existencias evolutivas más evolucionadas del universo y poseen un tiempo casi instantáneo, ese tiempo es un tiempo independiente del tiempo de la existencia. Con lo cual el tiempo de las almas pertenece a otra evolución, pero al mismo tiempo las almas están enlazadas al tiempo de la existencia a través de las vidas.

Como todo es un orden y todo evoluciona como orden, las vidas al dejar de vivir evolutivamente volverán a vivir en el lugar universal que evolutivamente le corresponda, a través del tiempo y de la jerarquía de almas.

Las dimensiones de la existencia

La existencia material sólo puede poseer como máximo tres dimensiones, la que le permite poseer el tiempo.

Realmente no es la existencia la que posee las dimensiones, es el propio tiempo el que hace posible que la existencia posea esas dimensiones.

La existencia material sólo puede poseer como máximo tres dimensiones porque es la mayor y más perfecta sincronización dinámica que permite la sincronización dinámica del tiempo.

La existencia material no podría existir como materia con dos dimensiones. La existencia material para poder ser materia necesita transformarse sincronizadamente con sus tres dimensiones a través del tiempo. 

¿Qué es la existencia?

El aproximadamente 95% del universo es energía oscura y materia oscura, eso no es la existencia atractiva que conocemos, tal vez esa existencia sea existencia repulsiva. La existencia atractiva es la existencia ordenada que se puede transformar con orden en la existencia que conocemos. Aunque la materia oscura, que es aproximadamente de un 15% del universo, podría ser una mezcla de existencia atractiva, repulsiva e inexistencia. 

La existencia que conocemos es la existencia compuesta, o sea la existencia ordenada por el orden universal compuesto por el tiempo y la existencia que se atrae entre sí.

¿Por qué la energía oscura no es existencia real?

Para que exista la existencia  real o compuesta se necesita que exista una casi perfecta sincronización del tiempo, y en la energía oscura no existe el tiempo. Allí no puede existir el tiempo porque allí todo es energía repulsiva, que no es existencia real sino una especie de tendencia repulsiva.

Esa clase de energía oscura no es existencia real, sino una existencia repulsiva instantánea, sin el tiempo. La cual, también se expande sin fin como tendencia repulsiva. Como en esa expansión repulsiva no existe el tiempo allí no se puede formar la existencia; por tanto no se puede formar ni las dimensiones, ni lo grande ni lo pequeño, etc. Es una clase de existencia repulsiva que no es existencia real sino tendencia repulsiva, la cual por eso se expande sin fin.
La expansión, en su camino expansivo originaba repulsivamente puntos estelares llamados estrellas, ya que todo pro produce su contra, creando mediante las estrellas grandes espacios de energías atractivas, que originarían espacios galáctico como el que vivimos. 

Autor: Salvador Sánchez Melgar
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